Titulo original: Rubinrot
Autor: Kerstin Gier
Genero: Fantasía
Reseña:
Como cualquier otro día, regresé pronto a casa al salir del instituto.Mi tía se había quedado sin sus dulces favoritos y me ofrecí para ir a la tienda y comprar más. Pero de camino empecé a sentir algo muy extraño: las piernas me temblaban y tuve una sensación rara en el estómago.De repente, la calle desapareció ante mis ojos.Poco después reapareció pero muchas cosas eran diferentes.Había vuelto al pasado.
Me llamo Gwen y soy la última viajera en el tiempo.Así empieza la aventura de mi vida...
Soy muy fan de todo lo que viajes en el tiempo supone y hacía mucho tiempo que esta trilogía llamaba mi atención. Había leído montones de reseñas, y como muchas coincidían en el caracter introductorio de este primer tomo, me esperaba una historia tal vez lenta, en la que ocurrieran pocas cosas. Nada más alejado de la realidad.
Rubí es un derroche de acción e ingenio. Sí, el libro puede ser introductorio, pero no te da un descanso, todo el tiempo están pasando cosas, muchas de ellas te dejan con la boca abierta o muerto de curiosidad.
Me gusta mucho el estilo de Gier, es muy ligero y divertido, tiene un gran sentido del humor y sabe ponerse en la piel de una chica de dieciseis años como pocos autores, con total naturalidad y mucha gracia.
Nuestra prota es Gwendolyn y tiene todo, pero todo para ser una Mary Sue, sin embargo no lo es. Sí, de la nada cambia su vida y no entiende ni pío, sí, se enamora del chico lindo a los dos segundos de conocerlo y sí, muchas veces complica las cosas en lugar de solucionarlas. Pero con su naturalidad pasmosa, Gwen es una excelente protagonista que se compra al lector en un suspiro.
Me resulta odioso lo mucho que se la subestima, como la tratan otros personajes (sobre todo su prima, la perfecta Charlotte, quien se suponía que debía heredar el gen de los viajes en el tiempo, y varios de los Vigilantes). Gwen no es perfecta, es real, y por eso se gana nuestra simpatía, con sus meteduras de pata, sus reflexiones y su desorientación.
El protagonista masculino es Gideon, aunque no se luce demasiado en este libro, sabe capturar nuestra atención y, aunque por momentos parezca un antipático recalcitrante, logra robarse nuestro cariño y un buen par de suspiros.
Como ya dije, la trama no da un descanso, pasan cosas todo el tiempo y es muy divertida (literalmente divertida, amé la dosis de sentido del humor de esta historia). Es predecible en tan solo un punto, en uno importante, pero dado el comienzo del libro... no es predecible la palabra correcta. La escritora quiere que sepas algo muy importante que la protagonista y quiénes la rodean desconocen, es como un secretito entre quién escribe y vos, que no se descubre hasta muy avanzada la historia.
Tiene un ritmo excelente, un montón de misterios y, ahora hablo de la trilogía y no de este libro en sí, es ideal para leer de un tirón (es lo que estoy haciendo) porque los finales son de esos que te la dejan picando y con los ojos como platos.
Muy buena historia, ¡la estoy disfrutando un montón y se las recomiendo sin dudarlo!
0 comments:
Post a Comment